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Farmacéutico. Profesor Titular en la UDO. Consultoría y Asesoramiento en planificación, organización y gerencia. Coaching. Políticas públicas. Estudios de especialidad, maestría y doctorado.

lunes, 26 de septiembre de 2022

Seguridad del Paciente y Día Mundial del Farmacéutico. El Paciente

 

Medicamentos, farmacéuticos y farmacia

 

Seguridad del Paciente y Día Mundial del Farmacéutico. El Paciente

“Medicación sin daño” (OMS – 2022)

Establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en su Asamblea General Número 72 realizada en el mes de mayo de 2019, el Día Mundial de la Seguridad del Paciente tiene su origen en el reconocimiento de la inseguridad de los modelos de atención clínico sanitario y el manejo de las diferentes variables que constituyen el entono del paciente. Consecuencias directas e inconvenientes en la atención al paciente son, en lo inmediato, su fallecimiento o la limitación de sus posibilidades de acción debido a la instalación de condiciones incapacitantes asociadas a las condiciones de atención, a los que puede haber sido sometido.

Se trata de un día para la reflexión acerca de estas situaciones que en lo mediato, implican cargas emocionales indeseadas, gastos económicos y financieros que pueden ser evitados o reducidos mediante una mejor praxis en cuanto a estas responsabilidades ante el paciente. Una consecuencia obligada de esta situación, lo constituye la necesidad de trabajar con el paciente en el marco del equipo de atención integral de salud. Un equipo donde lo fundamental  e importante es el paciente y su bienestar por encima de toda vertiente de celos profesionales por cuanto en el equipo de salud, solo tiene cabida una verdad, la atinente a la enfermedad en términos de diagnóstico, terapia, aplicación de la misma y cuidados e intervención inter, multi y trasdisciplinaria si fuese el caso y las necesidades así lo exigieran.

Cabe destacar dos elementos esenciales y sustantivos en cuanto a la salud. En primer lugar, el aterrizaje y supresión del endiosamiento sobre el cual se han encumbrado profesionales de la salud que se asumen como dueños exclusivos del conocimiento referido a esta, cuando la sociedad actual se desarrolla sobre la base de la democratización y acceso a los saberes y el conocimiento en cualquier actividad humana, si bien los estados autorizan el ejercicio profesional a aquellas personas que cumplen los requisitos de entrenamiento y capacitación para el cumplimiento de los fines inherentes a cada profesión. Esto es, en cuanto a lo humano, ya que no hay dioses más que en el ámbito de la teología. Todos somos mortales con aciertos y carencias.

En segundo lugar, el establecimiento de esa fecha relativa a la seguridad del paciente empodera a este, en tanto responsabilidades que tienen que ver con la propiedad y decisiones inherentes a su cuerpo y organismo y el nivel de conocimientos, saberes e información que él, o en su defecto la familia, poseen; al no poder disponer este, entonces de la vigilia conscientemente necesaria para asumir aquellas en cuanto a su autorresponsabilidad. Esto, que visto así pudiera sentirse como abandono al paciente resulta en lo contrario, por cuanto al hacerse responsable de sí mismo ante sus padeceres de salud y afrontarlos con el asesoramiento y acompañamiento necesario y suficiente, elevan sus niveles de autoconciencia y le hacen menos proclive al engaño y la especulación de todo tipo que sabemos gira alrededor de la enfermedad y los intereses que más allá de la salud se mueven a su alrededor.

Esto último, predispone a la persona en un contexto de crecimiento y desarrollo personal que indisolublemente tiene sus repercusiones en el seno de la sociedad toda, instalando en el inconsciente colectivo una visión diferente de las realidades tal y como las apreciamos en nuestros países, donde las carencias y debilidades poblacionales pasan a constituir factores que facilitan el dominio y control sobre la gente por parte de agentes inescrupulosos que trafican con ello para el sometimiento de los menos favorecidos obteniendo así beneficios de toda naturaleza.

Para este año 2022, el Día Mundial del Paciente, traído a cuenta el pasado sábado 17, tuvo y mantiene de manera sostenida un referente de trabajo que lleva el Reto por la Seguridad del Paciente asociada a lo que constituye la Medicación sin daño. Medicación sin daño implica la utilización responsable de los medicamentos para la prevención de la enfermedad, a nuestro modo de ver un contrasentido conceptual, o la curación en cuanto a esta, base del modelo clínico sanitario eminentemente curativo que rige en nuestros países.

Como bien sabemos, al hablar de medicamentos, drogas, productos y especialidades farmacéuticas estamos en cuanta de que la responsabilidad y autoridad delegada del Estado en esta materia corresponde a los profesionales de la farmacia que hasta ahora y en el caso específico venezolano se han formado y continúan formándose en nuestras universidades nacionales y autónomas como lo son la Universidad Central de Venezuela y la Universidad de los Andes así como en universidades privadas, caso de la Universidad Santa María.

Por otra parte y, en asociación con esta fecha en el contexto celebratorio del Día Mundial de Farmacéutico, los profesionales de esta área de la salud reflexionamos en cuanto a la seguridad del paciente.


Ciudad Bolívar, 23 septiembre 2022

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